¿Era esto lo que buscaban? Dramáticas noticias que antes no se producían

La pérdida de cualquier vida siempre produce una gran tristeza. Pero cuando quien pierde la vida es un niño, el dolor es enorme para todo el mundo, sobre todo para la familia, como es lógico. Pero además de dolor, lo que estamos viendo ahora nos indigna porque llevamos meses avisándolo, lo veíamos venir.

Llevamos mucho tiempo diciendo que vamos a ver noticias terribles, que vamos a ver cosas muy duras y que teníamos que estar preparados para ello. Por eso no nos sorprende leer la noticia que publica el digital ‘La Mañana‘: “Muere por cóvido-19 un menor en Lérida que tenía una enfermedad grave de base”. El niño tenía 13 años y padecía asma.

Después ya llega el indignante artículo con el que se intenta justificar todo del que lo único que vamos a decir es que nos produce vergüenza ajena, nos parece miserable. ¿Cuántos niños habían muerto antes de lo que ustedes ya saben por el famoso virus? ¿Cuántas noticias como estas se producían?

Ninguna. Absolutamente ninguna. De hecho, desde el primer día siempre nos han contado que este virus no les afectaba, que apenas sufrían un resfriado, ¿y ahora se mueren? Y después, lo de hacer mención a que tenía una “enfermedad grave de base” para justificar lo injustificable.

No todo es trabajo. No todo es dinero. Está la dignidad y los principios. Está la empatía hacia el prójimo y mucho más hacia un niño.

Qué asco de sociedad esta en la que vivimos.

El problema no son los globalistas ni los genocidas titeres llamados gobiernos que ni siquiera forman un 1% de la poblacion. El gran problema es la sociedad, dispuesta a ejercer crimenes a cambio de un sueldo. De verdad alguien piensa que todo lo que esta sucediendo seria posible sin la colaboracion directa de la poblacion (99%) ? La respuesta es No y el grave problema engendra de un gran alto porcentaje de seres criminales llamados humanos. Sin estos criminales nada de lo que ocurre seria posible. Hay que empezar a culpar a los verdaderos criminales y no a una minoria por el simple hecho de tener dinero no obstante robado.