Miles de simpatizantes y opositores del Gobierno de Nicolás Maduro han coincido ayer sábado en las calles de Caracas por motivos opuestos; los primeros para reclamar la paz y mostrar su respaldo al Ejecutivo chavista ante las manifestaciones de estudiantes y opositores que el miércoles acabaron con tres jóvenes muertos, y los segundos para protestar contra las políticas de Maduro.
Mientras en el centro de la capital, miles de personas han hecho una demostración de fuerza del chavismo tras una semana de protestas e incidentes, en el este de la ciudad, cientos de personas han reclamado la dimisión de Maduro y han denunciado sus políticas, desde la represión pasando por la inseguridad que se vive en el país.
En la marcha progubernamental, Maduro ha acusado a sus rivales de tramar un golpe de Estado y ha reclamado al líder opositor Leopoldo López, uno de los organizadores de la marcha del miércoles y que está buscado por la justicia acusado de terrorismo, que se entregue. "¿No querías ver gente en las calles? Pues os daremos gente en las calles", ha clamado el presidente, aplaudido y coreado con gritos de "No al fascismo".
"Cobarde, fascista, te estamos buscando"
"No voy a ceder ni un milímetro del poder que la gente de Venezuela me ha dado. Nada me va impedir construtir la revolución que el comandante Chávez nos dejó", ha remachado.Más duro ha sido con Leopoldo López. "Cobarde, fascista, entrégate que te estamos buscando", ha dicho. Maduro ha acusado al líder del partido Voluntad Popular de incendiar el país y de salir con una "sobredosis siempre encima, una sobredosis de odio, de cobardía, retando al poder del pueblo".
En la calle para hacerse oír
Por su parte, estudiantes y opositores venezolanos se han concentrado en el este de Caracas. También han acudido, vestidas de blanco, las madres de los detenidos desde el miércoles; más de 150; de los que, según la oposición 112 han sido ya liberados."Estaremos en la calle los días estrictamente necesarios, y nosotros estaremos allí de manera pacífica, organizada, tratando por supuesto de decirle a este Gobierno que no puede seguir atropellando a los jóvenes", ha dicho el diputado opositor Richard Blanco.
La diputada María Corina Machado ha destacado que "quien tiene las armas es el régimen" mientras que las armas de los ciudadanos son sus valores y de ahí que la convocatoria pacífica que hicieron ayer sábado "los jóvenes" tuviese "esa respuesta de las madres". "Cuando se cierran las vías constitucionales, cuando los tribunales le dan la espalda a la gente, cuando los ministerios le tiran la puerta en la cara a quienes protestan, los ciudadanos encontramos en la protesta en la calle el mecanismo de expresión ciudadana para que tengan que escucharnos", ha apuntado.