De ser un cantante de ópera, el cubano Juan Esteban terminó como salsero y abriéndole conciertos a artistas como Jerry Rivera y Gilberto Santa Rosa, a quienes siempre admiró.
“Poder trabajar junto a estos salseros fue una gran experiencia para mí como persona y como artista. También admiro a otros cantantes como Marc Anthony y Víctor Manuelle”, dijo ayer el artista, quien proviene de una familia de músicos.
Para Juan Esteban, de 25 años, la transición como intérprete de música clásica y cristiana a la tropical no fue difícil.
“Antes de cantar ópera ya era salsero. Cuando se nace en un país caribeño como Cuba hay algún vecino en el barrio que escucha salsa a todo volumen y uno va creciendo con eso”.
El tenor se encuentra en la Isla para promocionar su disco Juan Esteban, cuyo primer corte Bum, bum, bum ha logrado entrar en los primeros lugares de la revista Billboard.
“Desde que tengo uso de razón me interesó hacer música popular, pero las condiciones de la vida me llevaron por otro rumbo”, aseguró.
Como ya hay un “tenor de la salsa” (Tito Nieves), la fanaticada de Juan Esteban lo ha apodado el “Mister”.
“No sé por qué me lo pusieron, fue un fan club que tengo en Nueva York, y no me molesta”.
El cantante afirmó que la salsa no está muriendo, como mucha gente comenta.
“Siguen los talentos de siempre sacando discos y no hay cantantes nuevos como yo, que sigan la tradición que ellos iniciaron. Mi meta es convertirme en uno de los grandes salseros como son los de Puerto Rico”.
Hace tan sólo tres meses, el artista se convirtió en padre por primera vez y aunque tiene que viajar a muchos países de Latinoamérica haciendo promoción y presentaciones, se lo está disfrutando al máximo.
Además de carrera musical, Juan es propietario de oficinas que dan servicios dentales al público que le permiten vivir una vida holgada junto a su familia.