Las dos delegaciones sirias que representan al Gobierno y la oposición terminaron hoy la segunda ronda de negociaciones sin un acuerdo sobre una próxima reunión y la continuación del proceso de paz.
"Creo que es mejor que cada parte reflexione y
asuma la responsabilidad si quieren que sigamos", manifestó en rueda de
prensa el mediador internacional, Lajdar Brahimi.
Brahimi, visiblemente pesimista sobre el rumbo del proceso, pidió disculpas en varias ocasiones por la ausencia de progresos.
Aunque no han acordado una fecha para una nueva
tanda, las partes sí que se han puesto coinciden en cuanto a la agenda
de las negociaciones en una hipotética tercera ronda, que Brahimi espera
llegue a celebrarse en algún momento.
La propuesta de Brahimi para esa próxima reunión
aceptada por las delegaciones es discutir el primer día que vuelvan a
verse las caras el fin de la violencia y la lucha contra el terrorismo; y
el segundo día estaría reservado a la formación de un órgano de
gobierno transitorio.
"Al menos hemos acordado una agenda, pero falta decidir la manera de abordarla", añadió el mediador.
A pesar de que durante esta semana el diálogo
entre las partes ha estado totalmente bloqueado por sus diferencias de
criterio sobre esa agenda, Brahimi expresó que cree que llegará a
producirse esa tercera ronda, que en un principio se iba a celebrar tras
una semana de receso.
El mediador reconoció que en esta segunda tanda de
conversaciones no se han logrado avances, pero recordó que de la
anterior fase negociadora salió un pequeño acuerdo para una tregua
humanitaria en Homs, que "abre una nueva esperanza para comenzar a salir
de esta crisis".
Brahimi tiene previsto viajar en las próximas
semanas a Nueva York para informar al secretario general de la ONU, Ban
Ki-moon, y al Consejo de Seguridad.
Sobre el rol que Washington y Moscú, como
promotores de proceso, podrían desempeñar en los próximos encuentros
entre sirios, el mediador señaló que los rusos y americanos son "socios
de la ONU y miembros importantes del Consejo de Seguridad".
"Ninguno de ellos puede apartar la vista de la
crisis en Siria. Por supuesto que habrá trabajo conjunto entre la ONU y
estos países", precisó.
El proceso de paz está estancado por las
diferencias de criterio entre las partes para abordar el Comunicado de
Ginebra, el documento base de las negociaciones acordaron Rusia y EEUU
en junio de 2012, que menciona el cese de las hostilidades y la
necesidad de una transición política en Siria.
"El Comunicado de Ginebra no es un fin sino algo
que sirve para ayudar a ambas partes a que se sienten juntas, e iniciar
el largo camino para acabar con el conflicto", dijo Brahimi al respecto.
EFE