Uruguay venderá el gramo de marihuana a un dólar (no llega a un euro). Es la forma que tiene el país de regular un mercado en manos del narcotráfico. Cuando se apruebe el nuevo marco legal para esta droga, el Gobierno espera que “el coste de la marihuana se asimile al rango en que se consigue esta sustancia en el mercado ilegal”. El secretario general de la Junta Nacional de Drogas de Uruguay, Julio Calzada, adelantó en declaraciones al diario uruguayo El País el precio al que venderá el Estado la marihuana y se espera que el Senado de luz verde a la ley el próximo noviembre y el proyecto esté en marcha en el “segundo semestre de 2014”.
En Uruguay se calcula que hay 120.000 personas que consumen marihuana al menos una vez al año. El país tiene 3,3 millones de habitantes.
“Queremos arrebatarle al narcotráfico su mercado”, dijo días atrás el presidente José Mujica durante su discurso en la Asamblea General de las Naciones Unidas. En este sentido, Calzada afirmó que el Estado “va a ofrecer un lugar seguro para comprar, un producto de buena calidad y, encima, lo va a vender al mismo precio”.
Pero los opositores no están del todo de acuerdo y acusan al Gobierno de imprudencia. Pablo Mieres, del Partido Independiente, criticó que el Gobierno esté hablando ya de precio cuando todavía no se ha aprobado la ley. “Es una declaración muy poco seria, muy poco responsable, la de estar estableciendo ya un precio al consumo sin tener todos los elementos”. En declaraciones a este diario lamentó que se esté adelantando el precio de mercado sin tener en cuenta factores como la carga tributaria que, a su juicio, debería tener, como la del alcohol o el tabaco.
No opinan lo mismo quienes creen que esta política de venta legal de droga no puede seguir las mismas pautas que otras si se quiere conseguir el impacto buscado entre la población y evitar la compra en el mercado clandestino. “No creo que tenga que tener ningún tipo de gravamen, ni aprovechamiento”, opina el jurista Óscar Sarlo. Al menos de momento, porque cree que se trata de un asunto “dinámico” y ante el “fracaso” de las políticas anteriores era necesario “experimentar”.
En la oposición, el Partido Independiente es favorable al autocultivo y al consumo en los clubes con membresía, sin embargo, cree que la comercialización “va a ser un fracaso” porque el Gobierno se enfrenta a un “competidor clandestino que puede bajar aún más los precios e incluso la calidad”.
El proyecto del Gobierno autoriza el autocultivo, hasta 6 plantas por hogar de las variedades de semillas habilitadas por la ley; también los clubes de consumidores, y se permite al usuario, una vez registrado en un banco de datos protegido, comprar hasta 40 gramos al mes.
Desde el Gobierno ya se está empezando a trabajar en la implementación de la ley. El texto del proyecto fue aprobado el pasado 31 de julio en la Cámara de Representantes, con 50 votos a favor, 46 en contra y 3 ausencias.
Al igual que en el caso del tabaco, en Uruguay no está permitido fumar marihuana en espacios públicos cerrados y tampoco conducir cualquier vehículo bajo el efecto de drogas. Además, se prohíbe la publicidad de la sustancia.