Estereotipos y prejuicios estigmatizan y discriminan a las personas que padecen algún trastorno mental, que se ven a menudo abocadas a la exclusión social por "actitudes y comportamientos muy negativos hacia ellas", según denuncia un informe elaborado por la Mesa del Tercer Sector Social de Cataluña.
El
informe, titulado "Estrategias de lucha contra el estigma en salud
mental", recopila algunos datos de estudios que reflejan cómo "las
personas con problemas de salud mental están sometidas al estigma y la
discriminación sobre una base diaria y les puede afectar a todos los
aspectos de la vida".
Así, explica que un 70 % de las personas con
esquizofrenia diagnosticada no tienen empleo y casi la mitad han
confesado haber sufrido discriminación en la búsqueda o mantenimiento de
un puesto de trabajo.
El informe también hace referencia a que las personas con problemas de salud mental son once veces más propensas a ser víctimas de delitos violentos y 140 veces más propensas a ser víctimas de un robo.
Otros
estudios citados en el informe señalan que un 71 % de los enfermos
mentales declaran haber sufrido alguna forma de victimización en los dos
últimos años, las más frecuentes intimidaciones (41 %), robos (34 %),
acoso sexual (27 %), agresiones físicas (22 %) o agresiones sexuales (10
%).
Además, un 36 % de ellos no denunció el delito porque tenían
miedo a no ser creídos por su problema mental. El informe detalla que en
los países desarrollados, entre un 35 % y un 50 % de las personas con
trastornos de salud mental graves no reciben el tratamiento necesario.
El dossier denuncia que "las personas con problemas de salud mental experimentan rechazo y aislamiento
y discriminación, sobre todo en el ámbito laboral, en las relaciones
sociales -fundamentalmente con amigos y pareja- e incluso en la
comunidad".
"Es más -añade el estudio- a menudo sus relaciones
sociales se limitan a otras personas con su mismo problema, por lo que
se genera un cierto fenómeno de 'guetización' que perpetua el
aislamiento social, lo que dificulta notablemente su integración
social".
El estudio advierte de que otro de los efectos del estigma es "el autoestigma, es decir, la asunción por parte de muchas personas con problemas de salud mental de los estereotipos, prejuicios y conductas negativas hacia ellos".
El
informe hace un breve repaso de la evolución histórica de las actitudes
sociales hacia las personas con problemas mentales y afirma que "una de
las claves que ayudan a entender la persistencia de los estereotipos
asociados a las personas con problemas de salud mental residen en el
papel de los medios de comunicación".
Se estima que la población
recibe el 90 % de la información sobre salud mental a través de los
medios de comunicación, que, según el estudio, se interesan poco por
este problema.
Por todo ello, el informe de la Mesa del Tercer Sector Social de Cataluña concluye que "es necesario modificar el imaginario social, las ideas que fundamentan los mitos y prejuicios que generan estigma sobre las personas con problemática de salud mental".