Ariel Castro, quien mantuvo como prisioneras a tres mujeres durante una década en Cleveland, iba esta mañana de regreso a prisión, tras leerse los cargos en su contra por secuestro y violación y no poder prestar una fianza de $8 millones.
En una breve audiencia, Castro compareció al tribunal municipal de Cleveland junto a sus hermanos Pedro y Onil, que fueron imputados de delitos menos grave desvinculados a los casos de secuestro y violación sexual en Cleveland.
Pedro Castro, de 54 años, se declaró en la audiencia no culpable de un caso por haber tenido abierta una cerveza en un lugar público en que no estaba permitido.
Contra Onil Castro, de 50, se presentaron cargos de droga que datan de hace 11 años, por lo que fueron desestimados, indicó Kathleen De Metz, defensora pública del tribunal municipal de Cleveland.
El informe policial explica como Ariel Castro, de 52 años y natural de Yauco, mantuvo como esclavas sexuales a las tres mujeres que raptó hace cerca de una década, cuando tenían entre 14 y 21 años.