Una residencia de ancianos privada de la región de Parísabandonó el pasado viernes en un hospital a una mujer de 94 años por impagos repetidos de la familia, hecho que fue denunciado hoy por el Gobierno francés.
“Sean cuales sean los motivos, la situación no puede más que chocar”, declaró a la prensa la ministra de las Personas Mayores, Michèle Delaunay, que consideró que “esa expulsión fue probablemente legal, aunque tenemos que conocer el contenido del contrato”.
Delaunay dudó de que se hayan respetado los procedimientos, porque “la salida forzada de una residencia de ancianos solo la puede decidir un juez”.
La residencia de Chaville (en el departamento de Hauts de Seine), que afirma tener pendiente de cobro una deuda de $52,000, dejó en el hospital de Châteaudun a la anciana después de haberla enviado con una ambulancia al domicilio de su hijo, donde nadie les abrió.
El personal encargado del transporte llamó entonces al asilo para saber qué hacía y allí le dijeron que ya se había ocupado con un nuevo residente la habitación de la anciana. La decisión fue llevarla al hospital de Châteaudun, donde pasó el fin de semana.
“Hace un mes y medio, para que reaccionaran, no encontramos otra solución que romper el contrato. Le telefoneamos una decena de veces, pero no reaccionó. Entonces tomamos la iniciativa de llevar la madre a su domicilio, a Brou”, explicó Boughaba. El director reconoció que no fue una buena decisión, pero tampoco se esperaban lo que luego ocurrió.