Las conversaciones directas entre Rusia y Ucrania concluyeron el pasado lunes en Estambul sin progreso significativo, con ambas partes acordando únicamente un intercambio de prisioneros de guerra. Moscú rechazó una vez más la demanda ucraniana de un "alto el fuego incondicional" de 30 días, proponiendo solo una tregua de dos a tres días en ciertas áreas del frente. Los negociadores acordaron intercambiar todos los prisioneros enfermos, gravemente heridos y menores de 25 años, mientras que Rusia se comprometió a devolver los cuerpos de 6.000 soldados ucranianos.
Ataques rusos de una violencia sin precedentes golpearon varias regiones ucranianas durante la noche del domingo al lunes, causando la muerte de al menos cuatro personas e hiriendo a decenas de civiles. El ejército ruso desplegó 101 drones en esta ofensiva nocturna, de los cuales 75 fueron interceptados por la defensa antiaérea ucraniana. Esta escalada ocurre mientras las discusiones bilaterales para un arreglo pacífico del conflicto permanecen en punto muerto, obligando a muchos civiles a buscar refugio en refugios antibombas.
Ucrania mató al general de división Mikhail Gudkov, comandante adjunto en jefe de la marina rusa, en la región de Kursk según el anuncio del gobernador de la región de Primorsky, Oleg Kozhemyako. Gudkov, quien también dirigía una brigada que luchó en Ucrania, es uno de los oficiales rusos de más alto rango que han sido eliminados desde el inicio de la invasión a gran escala hace tres años, y había sido nombrado en este puesto por Vladimir Putin en marzo pasado.
Rusia bombardea masivamente Kyiv y Odessa, tres civiles muertos
Nuevos ataques nocturnos rusos de magnitud considerable golpearon Ucrania en la noche del lunes al martes, matando a tres personas e hiriendo a varias en Kyiv y Odessa. Rusia lanzó 315 drones explosivos y 7 misiles contra varias regiones ucranianas, de los cuales 213 drones fueron interceptados por la defensa aérea. Estos ataques ocurren mientras las negociaciones de paz directas entre Moscú y Kyiv, iniciadas en mayo en Estambul, están en un punto muerto total, y el presidente Volodymyr Zelensky llama a sus aliados occidentales a una «acción concreta» contra la escalada militar rusa.
Los servicios de seguridad ucranianos (SBU) reivindicaron el martes un nuevo y audaz ataque contra el puente de Crimea, símbolo de la anexión rusa desde 2018. A las 4:44 de la mañana, 1.100 kg de TNT explotaron bajo los pilares submarinos de esta infraestructura estratégica de 19 kilómetros, provocando «daños severos» según Kyïv. Es el tercer ataque desde 2022 dirigido contra esta obra clave que permite el transporte de material militar ruso hacia la península anexada.
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