HiRADiOs Voz Dominicana

sábado, 2 de noviembre de 2019

SEÑALES ¿Para qué pueden servir las instituciones?







En los intentos de transformación que en México están en marcha, y con independencia de sus incidencias reales o discursivas, es central precisar el modo como desde el poder político se visualizan a las instituciones. Dejando de lado los ejercicios narcisistas de imposición del ego, quienes tienen el poder buscan utilizarlo para realizar un ideario. Con base en este, tratan de transformar la realidad en cierto sentido para cambiar condiciones de vida y a las vidas mismas. En ese buscar, hay dos maneras de concebir a los órganos del Estado. Una, la más obvia, como obstáculos al hacer de quienes ejercemos una influencia en nuestro entorno más cercano. Pero es una relación bidireccional, de doble influencia. Por lo común, las personas apelan a su fuerza de voluntad para rendir más. Pero el ambiente es como una palanca en la que podemos trabajar para conseguir más resultados con menos esfuerzo.


Los contextos en los que nos movemos pueden ser unos grandes aliados o unos grandes enemigos. Veamos qué son, cómo afectan y cuáles son los mejores para reforzarnos en lo personal y en lo profesional. Se pueden agrupar en tres categorías:
Materiales. Los lugares donde se vive y se trabaja, el barrio y el vecindario, la tecnología, el automóvil o el ajuar doméstico.
Personales. La familia, la pareja, los amigos, los compañeros de trabajo, los conocidos, el contacto en las redes sociales, los horarios y los hábitos.
Mentales. Las creencias, los paradigmas, la formación e información, la religión o los condicionamientos.
 

No hay comentarios:

Publicar un comentario