Es la primera vez que sucede algo así. Esta última semana tres canciones latinas ocupan puestos de relevancia entre los 20 primeros puesto del Oficial Chart del Reino Unido.
La fiebre la ha desatado el “Despacito” del portorriqueño Luís Fonsi, digno sucesor de Enrique Iglesias que hace 18 años llegaba al nº 1 de USA y nº 4 de UK con “Bailamos”, abriendo una la puerta del pop latino a los charts internacionales, pasando a convertirse en el artista de referencia con más números uno en el Hot Latin de Billboard y en el Hot 100 USA.
Luís Fonsi acaba de ceder la cabecera del top ingles en la que ha permaneció dos meses, pero esta misma semana Enrique Iglesias se encarama a la posición nº 10 con “Súbeme la radio” y sube a la posición 19 “Mi gente” de J Balvin.
España ya sucumbió a esta moda hace 10 años, las listas de ventas de los diferentes formatos musicales se rindieron al poder latino y más de la mitad de los éxitos del momento son de esa procedencia.
Las producciones musicales son cada vez más elaboradas, los arreglos y las colaboraciones entre artistas latinos que cada vez sólidas y creativas y por si faltara algo se acude al mercado internacional para que las primeras estrellas del pop también participen de esta moda que es mundial, viral e imparable.
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