Los cientos de ciudadanos que buscan ayuda de la Policía y el Departamento de Justicia por casos de venganza pornográfica, están desprovistos de un marco legal que los proteja por la exposición de imágenes íntimas si su consentimiento.
Ante esto, el sargento Luis Maldonado, de la División de Crímenes Cibernéticos de la Policía de Puerto Rico, relató a este periódico que hay muchos casos de venganza pornográfica que no pueden ser atendidos tras no encontrarse tipificados como un delito.
Maldonado reveló que la mayoría de las personas involucradas en estos “desquites” se quedan sin poder ponerle solución y que muchas veces estos casos se quedan en los cuarteles municipales sin ser informados a la División.
Además, explicó que no existen estadísticas oficiales para los mismos y que se han limitado a llevar un conteo interno por su cuenta propia. Algunos de estos delitos se canalizan a través de la Ley 54 de Violencia Doméstica. Maldonado relató que hay personas que ‘chantajean’ a sus parejas con que publicarán sus fotos íntimas si esta no le entrega la custodia de sus hijos o para obligarlos a reconciliarse.
Otras veces, el seductor cibernético conoce a su víctima a través de juegos como “Clash of Clans” en Facebook y de ahí pasa a otro tipo de aplicaciones móviles para iniciar el intercambio.
“Hay veces que simplemente una persona conoció a alguien por las redes sociales y en ese momento intercambió fotos y no le dio consentimiento de que las publicaras, pero de momento dejó de hablarle y las fotos aparecen en ‘websites’ de pornografía por venganza”, explicó el sargento Maldonado.
El listado de páginas de internet y redes sociales en la Isla dedicados a esto no se quiso revelar, pero sí se confirmó que usualmente utilizan el servicio de ‘Bloggers’ que pertenece a Google y la plataforma Tumblr que se especializa en microblogging.
En el 2014, la Policía estimó cerca de 39 casos de porno venganza y en lo que va de 2015 ya van 7 casos de porno venganza que se quedan como un delito a ciegas. El sargento aseguró que dicha división ayuda a las personas a reportar las páginas.
“El problema es que están despidiendo personas de los trabajos por bochorno que han sentido por estas situaciones y aquí se va gente llorando sin nosotros poder ayudar. Es preocupante y lastimoso. A nosotros nos ha tocado vivir esto con las personas porque vienen aquí y uno trata de resolverle, pero muchas veces nos vemos maniatados”, puntualizó Maldonado.
Durante las vistas públicas previas a la aprobación cameral de la Ley contra la Venganza Pornográfica de Puerto Rico, la uniformada depuso a favor de su inclusión en el Código Civil.
Sobre el contenido de la ponencia, Maldonado aseguró que su intención es que el Gobierno penalice a las personas que crean estas páginas sin revelar la identidad de la persona que envió la información para difundirlas mediante aplicaciones o plataformas de internet.
Entretanto, el Departamento de Justicia, que trabaja activamente la Unidad Investigativa de Crímenes Cibernéticos (UICC) informó que aunque la mayoría de las consultas llegan a través de la Unidad de Crímenes Cibernéticos de la Policía, también se reciben consultas directas de ciudadanos.
Las consultas que hace Justicia se relacionan con la porno venganza, acoso cibernético y otros tipos de crímenes a través de la web. Sumando todos estos, la oficial de prensa de Justicia, Gingger Correa, especificó que en el 2014 se registraron sobre 300 consultas atendidas.
Igualmente, precisó que en lo que va de año ya han realizado unas 52 consultas.
La abogada y experta en redes sociales, Julizette Colón Bilbraut señaló que el problema es que no existe una legislación que atienda crímenes cibernéticos.
“Tenemos unas disposiciones en el Código Civil, algunos artículos que hablan del robo de información de personas sin consentimiento, pero nada que trate directamente esos asuntos”, denunció.
La idea de Colón Bilbraut dispone que el acoso cibernético sea visto integralmente y no dividido por modalidades. El acoso y la porno venganza en la web se manifiesta a través del “sexting”, “cyberbullying”, “phishing” y “sextorsión”.
“Necesitamos un delito específico con relación al acoso cibernético, que sea una sombrilla para todos y a su vez una serie de leyes específicas que tifiquen conductas en diferentes poblaciones con relación al acoso cibernético”, indicó.
Colón Bilbraut destacó que para la Legislatura los crímenes cibernéticos son una realidad a ciegas que se quiere minimizar y que no se dice que es un problema.
“El problema es que si tú no criminalizas este supuesto te encontrarás con una serie de leyes federales que van a impedir que puedas levantar la tapa de las plataformas sociales para poder procesar datos”, detalló.
A juicio de Colón Bilbraut, el Gobierno debe elevar su conciencia y comprender que los crímenes en la web deben ser un delito, porque si no hay una subpoena en un proceso criminal las redes sociales como Facebook y Twitter no tendrán la potestad para dar información.
El peso de trabajar en contra del crimen cibernético no solo recae sobre las leyes y el Estado, recalcó Colón Bilbraut.
En el caso de los menores de edad, el Departamento de Educación y el Departamento de la Familia podría proveerles orientación, pero la responsabilidad es de los padres, añadió Colón Bilbraut.
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