A ver cómo explicar esto sin que parezca una tomadura de pelo. Hay que trasladarse hasta la universidad de McGill de Montreal para conocer al grupo de expertos que han realizado el texto.
Tras un profundo análisis, llegaron a la conclusión de que el deseo sexual es el mejor remedio para el dolor o bien, que con el dolor hay paraíso. Sólo se apagaría esa llama de un hombre si el sufrimiento fuera más intenso que el de una fuerte quemadura.
Para entender bien el concepto explicado por los expertos canadienses, hay que aclarar que el cuerpo humano siempre tiene mayor respuesta sexual pese al dolor físico que provoca un suceso biológico. Lo curioso es que afecta más a hombres y mujeres.
Este experimento se realizó primero en ratones y más tarde se pasó a corroborar en seres humanos, y sorprendente, las reacciones fueron muy similares.
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