El cirujano plástico David Matlock se enamoró de su paciente Verónica a quien transformó radicalmente, indicó Gawker.
El doctor conoció a su ahora esposa Verónica, de 38 años, cuando ella pesaba 40 libras más. La mujer acudió a su consulta porque quería practicarse una vaginoplastia.
El Doctor Matlock vio el potencial de esta mujer y le sugirió que se sometiera a una cirugía mucho más profunda llamada “Wonder Woman”, y que incluye una liposucción de la barbilla, los brazos y las piernas y una subida del trasero (cirugía brasileña).
Una vez diseñada, el doctor Matlock se enamoró de su creación y le pidió una cita. Hoy tienen una hija de 9 años e hicieron de su culto al cuerpo un modo de vida. La pareja pasa horas en el gimnasio y se presentan juntos a concursos de culturismo.