La redada de armas más grande en la historia de Nueva York fue posible gracias a Instagram.
En menos de 12 meses la policía neoyorquina confiscó 254 armas de fuego de diferente calibre y arrestó 19 sospechosos.
Todo comenzó con Matthew Best, un aspirante a rapero de Brooklyn que
se jactaba desde su cuenta de Instagram del negociazo que estaba
haciendo con la venta de armas de fuego.
Nueva York tiene leyes muy estrictas en cuanto al tráfico de armas,
por lo que la venta de armas de fuego en mercado negro tiende a ser muy
lucrativa.
El músico publicó fotos y vídeos de fajos de dinero en efectivo y
colecciones de pistolas por Instagram y, según el New York Daily News,
en algunos de sus posts afirmaba que estaba vendiendo armas desde su
estudio de grabación en Ocean Hill.
La mayoría de las fotos fueron removidas, pero no sin antes que el
equipo antinarcóticos de la policía neoyorquina los descubrieran y le
pasaran el dato a agentes encubierto.
Poco tiempo después, un investigador del departamento de policía de
Nueva York descubrió que se trataba de una red de tráfico de armas que
operaba en varios estados.
El agente, cuya identidad no fue revelada, empezó a seguirle la pista
a Best el año pasado, cuando se enteró que el rapero y un amigo estaban
vendiendo armas casi tres veces más caras de lo que habían pagado al
comprarlas a Walter Walker y Earl Campbell, dos tráficantes de armas de
Carolina del Norte y Carolina del Sur, informó el New York Post.
Walter y Campbell fueron acusados de ser los cabecillas de las redes
de tráfico de armas que suplían armas de fuego del sur de los Estados
Unidos hasta Nueva York.
Según las autoridades, durante la investigación se incautaron 243 pistolas, nueve rifles y dos escopetas.
Durante una conferencia de prensa, Michael Bloomberg, alcalde de la
ciudad de Nueva York, aseguró que “sin dudas” la operación ha salvado
vidas.