"También se quita ese derecho a centenares de jóvenes en las calles de Chicago cada noche", dice Obama. Cuenta ahora que ha colgado en su estudio el cuadro que pintó una de las niñas que perdieron la vida en Newtown.
"Este siempre ha sido un país de ciudadanos libres y eso no va a cambiar, pero no vivimos aislados sino en sociedad, somos responsables de los demás. El derecho a reunirse libremente fue despojado de los asistentes a un cine de Colorado, los estudiantes de Columbine..."
"La única manera en que podemos cambiar esto es si los ciudadanos estadounidenses lo demandan, si dicen basta". Promete a una de las niñas que le escribieron que trabajará duramente para conseguir sus objetivos y que el Congreso apruebe estos cambios
Obama asegura que el Congreso "debería estudiar el efecto de los videojuegos violentos sobre los niños". Todas las medidas han sido recibidas con aplausos entre los asistentes al auditorio de la Casa Blanca.