El perdón es una estrategia que se usa en la psicoterapia con el propósito de que la persona que ha pasado por una experiencia dolorosa pueda hacer un cierre emocional a algo que le estaba molestando, señala el psicólogo clínico Alfonso Martínez Taboas, catedrático de la Universidad Carlos Albizu.
“El beneficio del perdón es como una liberación personal, se cierra algo que estaba consumiendo a la persona”, agrega el experto, quien dice que si no se hace la persona va a estar “rabiando” y, emocionalmente, eso afecta.
Si la persona que hizo el daño está viva, explica Martínez, y se tiene contacto con ella, el proceso de perdón se puede hacer directamente.
“Le estoy demostrando que tengo esa capacidad interna de soltar ese coraje o ese dolor; demuestro que soy una buena persona y que tengo la fuerza interna para cerrar la página”, abunda el psicólogo, aunque resalta que se debe tener en cuenta que perdonar no quiere decir que se olvida lo que pasó.
“Eso de olvidar no es posible. Cuando se perdona se va la carga emocional que estaba pegada al recuerdo. Y cuando se hace, ese recuerdo ya no duele, ya no ofende porque se trabajó emocionalmente con eso y se cerró ese capítulo”, sostiene Martínez.
En eso coincide la psicóloga y consejera Naychaly Rivera Nieves, quien destaca que perdonar en un proceso continuo y que no significa olvidar. “Más bien, es una acción que te da la oportunidad de vivir libre”,añade.
Y esa libertad, indica, implica ir en contra de la reacción natural de venganza y búsqueda de justicia ante la persona o situación que piensas y sientes que te ha hecho daño.