James Holmes, que estaba estudiando Neurociencias en un programa de doctorado en Colorado, se crió en San Diego, donde sus padres viven todavía en una apacible calle de casas de dos pisos con tejados rojos. Jugó fútbol en la secundaria Westview High y era corredor de campo traviesa antes de ir a la universidad a estudiar Neurociencias. Según Bloomberg, estaba en proceso de dejar el programa debido a sus bajas calificaciones.
“Nuestros corazones están con aquellos vinculados a la tragedia y con las familias y amigos de los envueltos”, indicó la familia de Holmes ayer viernes en una declaración escrita. “Pedimos a los medios de prensa que respeten nuestra privacidad durante estos momentos difíciles”.
No hay indicaciones hasta el momento de que Holmes hubiera tenido algún problema con la ley antes del viernes. Karen Dalton , portavoz del Tribunal Superior de San Diego, informó que no se había encontrado expediente alguno bajo su nombre, ni siquiera por una multa de tránsito. La fiscalía del condado Riverside tampoco tiene historial delictivo alguno bajo su nombre, reveló John Hall, vocero de la fiscalía de distrito.
La policía de Colorado dijo que Holmes disparó dentro de un cine atestado en el suburbio de Aurora, en Denver, mientras usaba una careta antigás, con un saldo de 12 personas muertas y otras 59 heridas. Holmes permanece detenido en Colorado. El FBI informó que no había indicación alguna de que el ataque estuviera vinculado a algún grupo terrorista.
Jackie Mitchell, vecino de Aurora, afirmó que había reconocido la foto de Holmes en la televisión, y describió al sospechoso como alguien inteligente y un poco “autosuficiente”.
“Sólo hablamos de fútbol. El tenía una mochila y espejuelos de sabelotodo, y parecía un tipo muy inteligente, y yo pensé que era uno de los estudiantes de la universidad”, comentó.
No hubo referencia alguna a planear un ataque, subrayó Mitchell.
Ayer viernes por la mañana, la policía fue a buscar al padre del sospechoso, gerente de una compañía de software, a su casa de San Diego. La madre permaneció dentro de la casa, recibiendo a visitantes de su familia que vinieron a darle su apoyo.
“Como pueden imaginar, la familia Holmes está muy afectada con todo esto”, declaró. “Es un suceso trágico y ha tomado a todo el mundo por sorpresa.”
Anthony Mai, de 16 años, quien se crió en la casa de al lado de Holmes, describió al sospechoso como una persona “solitaria” que en general no hablaba con nadie pero cuya conducta no tenía nada de inusual.
“El parecía un poco reservado, pero no demasiado. Era normal”, aseguró. “Esto es sólo un presentimiento, pero a mí me parecía como que él tenía algo, como que se metían con él o algo”.
Su padre, Tom Mai, ingeniero eléctrico retirado, afirmó que Holmes era callado.
“Yo lo saludaba de vez en cuando. El parecía un muchacho tímido”, indicó a los reporteros.
Amplió que los Holmes llevaban viviendo en la casa de San Diego alrededor de 10 años y que eran “una familia muy, muy buena”. La madre de Holmes es enfermera. El sospechoso tiene además una hermana menor.
Mai afirmó que la madre le había dicho que Holmes no conseguía trabajo después de terminar una maestría en una escuela de la Universidad de California y por eso había regresado para estudiar.
Holmes se graduó de la Universidad de California, Riverside, en la primavera del 2010 en Ciencias en Neurociencias, declaró el portavoz de la universidad, Sean Nealon. Hasta ahora no hay otros detalles sobre la vida del sospechoso en el recinto universitario, Nealon.
En el 2011, Holmes se matriculó en el programa de doctorado de Neurociencias de la Universidad de Colorado-Denver, pero estaba en proceso de retirarse, afirmó la vocera del centro de estudios, Jacque Montgomery. Directivos de la universidad dijeron que Holmes estudiaba en la Escuela de Medicina de la universidad.