Con el reto de enamorar y amarrar a su base para asegurar su voto en las próximas elecciones y en las consultas de agosto, el Partido Nuevo Progresista (PNP) y el Partido Popular Democrático (PPD) cierran hoy sus convenciones con magnas asambleas de delegados en las que aprobarán sus respectivos planes de gobierno.
El PPD espera agrupar en el hotel Río Mar en Río Grande sobre 5,000 personas entre delegados y militantes que llegaran para escuchar los consabidos discursos y avalar el programa de la Pava.
Los novoprogresistas, por su parte, trasladaron la asamblea al coliseo Rubén Rodríguez en Bayamón en busca de movilizar una mayor cantidad seguidores. En la actividad se rendirá homenaje al exalcalde de Bayamón, Ramón Luis Rivera.
“Este año las asambleas son un mecanismo para avivar a su base en un momento en que las encuestas como la de El Nuevo Día revelan que ninguno tiene amarrada a toda su gente”, afirmó el analista Luis Pabón Roca.
De acuerdo con las encuestas, el candidato del PPD, Alejandro García Padilla, tiene un por ciento mayor de los posibles electores. Pero, para ganar, ese partido necesita reactivar a cerca de 100,000 electores populares que no salieron a votar en las pasadas elecciones.
En el caso del candidato del PNP, Luis Fortuño, las encuestas revelan una reducción en su popularidad dentro de las filas de su propio partido.
“Para el PNP es crítico lograr el enamoramiento de su base con Fortuño. Y en el PPD, a pesar de que las encuestas favorecen a García Padilla, la base no está del todo convencida”, añadió.
Por su parte, el analista Domingo Emanuelli señaló que con estas asambleas los candidatos tomarán el primer impulso de cara los comicios electorales.
“El efecto de estas actividades es en la base y al PNP sobre todo le conviene porque no tiene su base amarrada y esta asamblea podría servir para amarrarla”, dijo Emanuelli.
Sostuvo, además, que en estas asambleas es que se comienza a desdibujar lo que será el énfasis de cada campaña.
Sin embargo, según Pabón Roca “para la mayor parte del País éste será un domingo caluroso para pasar en la playa”.
El PPD espera agrupar en el hotel Río Mar en Río Grande sobre 5,000 personas entre delegados y militantes que llegaran para escuchar los consabidos discursos y avalar el programa de la Pava.
Los novoprogresistas, por su parte, trasladaron la asamblea al coliseo Rubén Rodríguez en Bayamón en busca de movilizar una mayor cantidad seguidores. En la actividad se rendirá homenaje al exalcalde de Bayamón, Ramón Luis Rivera.
“Este año las asambleas son un mecanismo para avivar a su base en un momento en que las encuestas como la de El Nuevo Día revelan que ninguno tiene amarrada a toda su gente”, afirmó el analista Luis Pabón Roca.
De acuerdo con las encuestas, el candidato del PPD, Alejandro García Padilla, tiene un por ciento mayor de los posibles electores. Pero, para ganar, ese partido necesita reactivar a cerca de 100,000 electores populares que no salieron a votar en las pasadas elecciones.
En el caso del candidato del PNP, Luis Fortuño, las encuestas revelan una reducción en su popularidad dentro de las filas de su propio partido.
“Para el PNP es crítico lograr el enamoramiento de su base con Fortuño. Y en el PPD, a pesar de que las encuestas favorecen a García Padilla, la base no está del todo convencida”, añadió.
Por su parte, el analista Domingo Emanuelli señaló que con estas asambleas los candidatos tomarán el primer impulso de cara los comicios electorales.
“El efecto de estas actividades es en la base y al PNP sobre todo le conviene porque no tiene su base amarrada y esta asamblea podría servir para amarrarla”, dijo Emanuelli.
Sostuvo, además, que en estas asambleas es que se comienza a desdibujar lo que será el énfasis de cada campaña.
Sin embargo, según Pabón Roca “para la mayor parte del País éste será un domingo caluroso para pasar en la playa”.