De entrada, David Bisbal prometió que lo verían en el escenario como nunca antes. Y así fue.
El cantante español presentó anoche la primera de las tres funciones que realizará de su gira, “Una noche en el Teatro Real”, en el Centro de Bellas Artes Luis A. Ferré, en Santurce.
Sin hacer énfasis en su acostumbrado estilo moderno y energía vibrante, el intérprete mostró cómo puede lucir su voz en diferentes géneros musicales y estilos interpretativos, que se alejan de la música popular que lo ha caracterizado a lo largo de su carrera.Tal como en el disco, el artista inició con un tributo a su terruño con el tema, “Almería tierra noble”. Ese fue el punto de partida de una travesía sonora que no solo sobrevoló por lugares iberoamericanos, sino también por épocas.
Y es que el repertorio, además de incluir algunos de sus éxitos, también incorpora clásicos del cancionero hispanoamericano y otros inéditos, todos bajo un concepto acústico.
“Te quiero dijiste”, fue uno de los primeros clásicos que cantó Bisbal con un arreglo de bolero.
A uno de sus temas más conocidos, “Lloraré las penas”, le dio un carácter de flamenco, para el que incluso tocó el cajón.
El jazz, muy a tono con la escenografía íntima y tenue -que estaba enmarcada entre siete ‘chandeliers’ y una cortina luminosa que reflejaba las luces de colores- se asomó en varias ocasiones, como “En un rincón del alma”.
“Ahora se une el Sexteto de Cuerdas de aquí de la Isla, es un honor tenerlos. Ahora nos vamos a los años 60, con un cantante argentino que es uno de los grandes cantautores que tiene América Latina, Alberto Cortez”, señaló Bisbal antes de cantar el tema.
Bisbal expresó al público que -con esta gira y disco- celebra sus 10 años de carrera, lo que definió como “un sueño hecho realidad”.
Su acostumbrada fuerza no pudo faltar. Así lo hizo con “Ave María” cuando colmó la sala con su derroche de energía y al interpretar “Besos de tu boca” tema al que le incorporó un toque urbano y aprovechó para bailar y despojarse de su chaqueta, lo que provocó los gritos de sus seguidoras.
A lo largo del concierto, Bisbal reflejó la capacidad que tiene para matizar varios estilos con su estilo y cálida personalidad. Su picardía tampoco faltó al decirle a una chica del público: “Te llevo mirando desde hace rato”.
Ciertamente un concierto en el que demostró su crecimiento artístico y el que le mereció una ovación de la audiencia al final del corte “Silencio”. En ese momento, se despidió, y luego regresó para regalar sus últimos temas de la noche, entre ellos, “Y si fuera ella”.
En lo que fue uno de los momentos más emotivos del recital, el artista afirmó que poder pasar diez años provocando emociones en la gente "ha sido un verdadero sueño".
"Y tengo otro sueño y es que dentro de 60 años haya un muchacho parecido a mí, con el pelo recogido y todo, y cante en un escenario parecido a este y le diga al público, 'Voy a cantar una canción que cantaban para enamorar en el 2010', dijo antes de hacer que una pareja de enamorados se besara y pasó a cantar "Mi princesa".
El concierto cerró con "Esclavos de sus besos".