El presidente Barack Obama ha causado un escándalo en Polonia, después de referirse a un campo de exterminio nazi como “polaco”. Obama hizo la declaración en una ceremonia en la que se concedió a título póstumo al combatiente de la resistencia polaca Jan Karski la Medalla Presidencial de la Libertad.
La Casa Blanca dijo que Obama “se equivocó al hablar” y lamenta el comentario, pero personalidades polacas quieren una disculpa. Los polacos sufrieron una brutal ocupación nazi durante la guerra y rechazan cualquier sugerencia de responsabilidad por los crímenes nazis. Los polacos son particularmente sensibles a los comentarios que unen su país con el Holocausto.
Durante años, se han opuesto a cualquier descripción de los campos de exterminio nazis alemanes como “polacos”, ya que puede indicar su participación en el asesinato en masa de millones de judíos en los campos de Europa construidas en sus tierras.