Noda, que asumió el poder el pasado septiembre, es el primer jefe de Gobierno nipón que hace un visita de este tipo desde que su partido, el Democrático (PD), ganara las elecciones de agosto de 2009 y acabara con 54 años de gobierno del Partido Liberal Demócrata (PLD).
El primer ministro nipón se reunirá el lunes con Obama para reafirmar la cooperación entre los dos países y analizar la situación de seguridad en la región, en medio de la inquietud por la posibilidad de que Corea del Norte realice su tercer ensayo nuclear.
La visita de Noda, que mantiene la alianza con EEUU como piedra angular de la política exterior nipona, se produce además después de que Washington y Tokio anunciaran ayer el traslado de unos 9.000 marines estadounidenses desde Okinawa (sur) a Guam y otras ubicaciones fuera de Japón.
El ajuste responde al plan de reordenamiento de tropas estadounidenses en la región de Asia Pacífico, una cuestión que se espera también sea tratada en la cumbre entre ambos mandatarios.
Las relaciones entre EEUU y Japón atravesaron un bache poco después de que el PD llegara al poder y el entonces primer ministro nipón, Yukio Hatoyama, buscara el traslado de una polémica base militar de Okinawa, la de Futenma, fuera de ese archipiélago.
El plan no salió adelante, lo que contribuyó a que Hatoyama, que había incluido ese compromiso como parte de sus promesas electorales, presentara su dimisión en junio de 2010.
Según la agencia nipona Kyodo, se prevé que tras la cumbre los dos líderes emitan un comunicado conjunto en defensa de una alianza más profunda entre Japón y EEUU y un nuevo orden en los ámbitos de seguridad y economía en la región de Asia-Pacífico.
La última vez que un primer ministro japonés mantuvo una reunión formal con Obama en Washington fue en febrero de 2009, cuando el entonces mandatario Taro Aso, del hoy opositor PLD, fue el primer líder recibido en la Casa Blanca tras la investidura del presidente de EEUU.
EFE