Según la organización China Aid, con base en EEUU y que sigue de cerca el caso, diplomáticos de alto nivel de la Administración estadounidense y el régimen chino están negociando el futuro de Chen, un abogado ciego autodidacta que llevaba año y medio bajo arresto domiciliario en su casa en la provincia de Shandong (este).
"La Administración (del presidente estadounidense Barack) Obama debe apoyarle firmemente, si no quiere perder credibilidad como defensor de la libertad y el imperio de la ley", afirmó el presidente y fundador de China Aid, Bob Fu, en un comunicado.
De confirmarse la implicación de las autoridades estadounidenses en el caso de Chen, el suceso puede generar un posible conflicto diplomático en un momento muy sensible, ya que la próxima semana visita Pekín la secretaria de Estado norteamericana, Hillary Clinton.
Clinton encabeza una nutrida delegación que tenía por objetivo principal la cooperación económica entre las dos potencias, pero es probable que el caso de Chen acabe teniendo un papel destacado.
Preguntado sobre si la cuestión podría enrarecer las reuniones, el viceministro de Asuntos Exteriores chino Cui Tiankai aseguró hoy a periodistas que si bien los derechos humanos estarán en la agenda, no cree que el caso eclipse las conversaciones.
En Washington, por su parte, la portavoz de la Secretaría de Estado, Victoria Nuland, rehusó hacer comentario alguno sobre el asunto, limitándose a señalar que en el pasado Washington había expresado su preocupación por el arresto domiciliario de Chen y su familia.
La organización Human Rights in China asegura hoy desde Hong Kong que Chen "está a salvo pero no quiere abandonar China".
En las últimas horas se confirmó una nueva detención de un familiar del disidente, su sobrino Chen Kegui, un día después de que se arrestara a su padre Chen Guangfu, hermano mayor del abogado, y el propio Kegui apareciera en un vídeo por internet contando la situación.
El abogado invidente se escapó de su casa en la noche del pasado domingo, ayudado por varios amigos que le llevaron a un lugar seguro fuera de la provincia de Shandong.
Él y su familia permanecían retenidos sin cargos en su casa de Dongshigu, en la jurisdicción de Linyi, desde septiembre de 2010, después de cumplir una condena de cuatro años de prisión por alteración del orden público.
El enfrentamiento entre las autoridades y Chen comenzó en 2005, cuando el abogado sacó a la luz los programas de abortos y esterilizaciones forzadas llevados a cabo por las autoridades chinas de su provincia contra familias campesinas como parte de la política de "hijo único" vigente en el país.
En EEUU se ha convertido en un conocido disidente, y prueba de ello es que la cadena CNN ha intentado en varias ocasiones visitar su casa -una de ellas acompañada por el actor Christian Bale-, aunque en las dos ocasiones fue expulsada con violencia por la policía.
Pese al acoso que sufren los disidentes en China, en muy rara ocasión la diplomacia de otros países se ha implicado directamente en sus casos, y son muy contadas las ocasiones en las que estos activistas han conseguido refugio.
Uno de los casos más sonados en este sentido fue el de Fang Lizhi, uno de los líderes de las protestas de Tiananmen en 1989 (fallecido el pasado 6 de abril en EEUU), quien un día después de la matanza del 4 de junio entró en la Embajada estadounidense con su esposa para solicitar asilo y vivieron en ella más de un año.
Finalmente, en 1990, la pareja fue autorizada a salir de China, en un avión de las fuerzas aéreas norteamericanas, tras negociaciones entre el máximo líder chino Deng Xiaoping y el ex secretario de Estado norteamericano Henry Kissinger, enviado especial del entonces presidente George H.W. Bush.
A principios de este año, Wang Lijun, mano derecha del después defenestrado líder comunista Bo Xilai, pidió asilo en un consulado estadounidense en Chengdu (centro), pero en esa ocasión fue entregado a las autoridades chinas tras negociaciones.
"El caso de Chen debe gestionarse como el del profesor Fang Lizhi y no puede ser otro Wang Lijun", señalaba, recordando los dos antecedentes, el comunicado que hoy envió China Aid.
EFE